18 de septiembre de 2015

El riesgo de viajar

Muchas preguntas pasan por la cabeza de aquellas personas que se aventuran en su primer viaje, preguntas que a veces pueden retrasar el tomar esa decisión de soltar todo y salir a recorrer el mundo. El dudar es algo humano y le da esa incertidumbre a la vida que la hace divertida pero ¿cómo vamos a conocer todo lo que está allá afuera si no nos damos la oportunidad de salir y admirar el mundo que nos rodea?



Es cierto que no se puede controlar cada aspecto del viaje y a lo largo del camino nos vamos a encontrar con situaciones que podrían cambiar nuestra vida, pero bien dice el dicho "el que no arriesga no gana".

Y es que aunque el viajar normalmente genera un gasto la recompensa es más grande, se pierden cosas materiales pero se ganan recuerdos y experiencias que el dinero no siempre puede comprar.

Al viajar corres el riesgo de conocer gente de todo el mundo, y si tienes la suerte necesaria, hacer amigos en cada ciudad que visitas.



También corres el riesgo de conocer sobre nuevas culturas y formas de vida. Aprendes que no todos pensamos igual y eso no nos hace ni mejores ni peores, simplemente nos hace diferentes. Convives con religiones de valores diferentes a la tuya y comprendes que al final sólo son ideologías y no barreras de convivencia.



Corres el riesgo de aprender de las tradiciones milenarias que tienen las culturas indígenas de otros países, de experimentar como vivía la gente en tiempos donde no todo lo podías buscar en internet.


Existe la posibilidad de que al dar la vuelta en una esquina y sin que lo hayas estado buscando encuentres a esa persona que te enseñará que la vida es más fácil cuando vas acompañado.


Cuando viajas es posible que salgas de tu zona de confort a tal grado que sea necesario replantear tus prioridades, así como ponerte en contacto contigo mismo y saber quién eres y de qué eres capaz.


Una vez en el camino corremos el riesgo de volvernos personas pacientes, conscientes de nuestra condición y respetuosos con nuestro entorno. Comprenderemos que hay una línea muy delgada que mantiene el equilibrio de la naturaleza y la belleza que ella nos brinda, por lo que buscaremos preservarla por muchos años.



Pero lo más importante es que al viajar corres el riesgo de ser libre y feliz.

¿Qué estás esperando?



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¿Qué te pareció este post?